INTERFER®

Las corrientes interferenciales tienen un origen endógeno, en la intimidad del músculo, producto de la interferencia entre dos corrientes externas. Se caracterizan por tener una marcada acción excitomotriz ocasionando un masivo reclutamiento de unidades motoras, accediendo además a niveles de profundidad normalmente no alcanzados con otros sistemas de electroterapia. La acción muscular que genera el INTERFER® posee propiedades singulares ya que la intensidad de trabajo varía constantemente y en forma oscilatoria, desplazándose alternativamente hacia los cuatro electrodos. Además, al mismo tiempo que se trabaja la musculatura estriada, se estimula la bomba muscular periférica, que condiciona un incremento de la circulación venosa de retorno. Este sistema de corriente tetrapolar posibilita la utilización de intensidades muy elevadas sin molestias sensitivas, gracias a la disminución de la impedancia (resistencia) de la piel, ocasionada por la alta frecuencia de trabajo. Asimismo, esta técnica posibilita la estimulación de grandes áreas, actuando sobre grupos musculares de mayor tamaño, adaptando la colocación de los electrodos al área a tratar.

Las características descriptas anteriormente hacen que esta modalidad de electroterapia encuentre sus principales indicaciones en patologías traumatológicas, reumatológicas, circulatorias, y estéticas, como la PEFE, hipotonía y flaccidez muscular, afecciones circulatorias Casos de aplicación en tratamiento para flaccidez

por Centro de Estética Modelate